Os voy a contar un relato, para que identifiquéis la DEPENDENCIA emocional afectiva, del verdadero amor.
"Me llamo Inés, con 15 años conocí a José y me enamoré de él. tenía 20 años, él ya tenía coche, y venía a buscarme al instituto . A mis amigas les caía genial, era todo un caballero, yo creo que me envidiaban y todas querían encontrar a un hombre así para ellas. Pero yo me sentía tan privilegiada y envidiada que eso hacía que me sintiese superior al resto del mundo, me creía poderosa.
Mis notas comenzaron a bajar, porque todo mi tiempo libre era para dedicárselo a José. Me venía a buscar para salir por la noche a cenar, pero mi padre no me dejaba, y a mi me daba mucha rabia, porque pensaba que él salía igual sin mi. con sus amigos o tal vez algunas chicas también.
Así que con apenas 19 años me casé, y con poco más de 20 me quedé embarazada, creía que se me acababa el mundo, ahora tengo poco más de 50, una hija de 30. y no quiero que sufra como lo hice yo.
Bueno, os cuento como pasaba mi vida. yo cuidaba de la niña, y él volvía del trabajo, aun recuerdo a escondidas, le olía la ropa, le rebuscaba en los bolsillos, el teléfono, si me preguntas:"que buscabas"?. -pruebas. yo sospechaba que tenía romances, pero quería pruebas, no se para que. porque no lo hubiese dejado. simplemente era para alimentar mi enfado, mi rabia contra él. por ser mejor que yo. por eso yo lo admiraba. pero necesitaba que siempre estuviese pendiente de mi, si no, me creía morir. lo necesitaba tanto, tanto. yo interpretaba que ya no era su prioridad y eso me generaba dolor. era capaz de hacer cualquier cosa, con tal de que no me dejara. sentía pánico con el solo pensamiento que me abandonaba.
me separé de mis amigas, de mis seres queridos, ya que todo mi mundo giraba en torno a él. y yo quería que él hiciese lo mismo con su vida, pero él seguía teniendo su circulo, y yo solo lo tenía a él.
esta situación me generaba ansiedad, no podía dormir por las noches, siempre tenía ganas de llorar y una gran impotencia ante la situación.
Mi vida se había convertido en una lucha que nos va marchitando, quitando la ilusión, nos va haciendo invisibles y a veces incluso me enfermaba.
hoy soy consciente que le amargaba la vida. cada vez que volvía a casa era una discusión tras otra, y él poco a poco empezó a volver a casa más y más tarde. y eso hacía que aumentara mi desconfianza hacía él.
Yo lo conocí siendo un seductor, y esas armas que utilizaba conmigo, utilizaba con todo el mundo, era su carácter, su forma de ser, y yo pensaba que cuando dimos el "si quiero" y al nacer nuestra hija, él iba a cambiar. jaaaja, me río ahora de las mujeres que esperan que él cambie.
ACEPTACIÓN. sí, es una de las condiciones para el amor. es uno de los ingredientes que
Pilar Muñoz Hipnosis intenta enseñarme. cuando ella me preguntó ¿te quejas a menudo precisamente porque es o se comporta de esa manera, porque hace esas cosas que tan poco te gustan? o aunque quizás no te quejes, pero ¿te molestan?¿ sientes que estás tragándote cosas que no te hacen sentir bien? quizás lo aceptas aparentemente, para evitar discutir o generar situaciones incómodas, pero ¿cómo te sientes en tu interior? ¿te sientes bien aceptando cosas que no te gustan? ¿no te genera eso más ansiedad?
CIERRA los ojos y contesta
pero es que yo no puedo vivir lejos de él. la convivencia es mala. lo sé. cada uno en una habitación. viendo programas de televisión distintos, porque ninguno soporta la forma de ser del otro.-continuaba diciendo yo.
Mientras
Pilar Muñoz Hipnosis continuaba pacientemente: LA DEPENDENCIA EMOCIONAL AFECTIVA, es una adicción hacia otra persona, generalmente la pareja. Cuando uno sufre dependencia, genera una necesidad desmesurada del otro, renunciando así a su libertad y empezando un camino de lo más tortuoso y desagradable, en que por cada minuto de falsa felicidad, derramamos litros y litros de lágrimas.
Sé que el relato de Inés, es un poco extenso, pero no por ello dejarás de poder saber si te identificas o no con ella. tal vez tu relación sea dependiente y tú aun no lo sepas.
por mi experiencia, en TODOS los casos de Dependencia emocional hay una NO ACEPTACIÓN del otro.
para que me entendáis, la persona dependiente quiere al otro, quiere retenerlo, pero su manera de ser le saca de quicio. no le gusta que sea tan liberal o tan independiente, o tan pasota, o tan egoísta, o tan poco comunicativo, o tan poco afectuoso, etc..
O sea, en otras palabras: NO LE ACEPTA COMO ES. Ahí empiezan las quejas, malas caras, reproches constantes para exigirle al otro que cambie. Que entienda que no tiene que ser así. Y yo digo, AH NO? y por qué no? O sea, le queremos tanto y por otro lado no le permitimos que sea como es?.
y si tanto te disgusta como es...por qué no le sueltas y buscas a uno que sea como tu deseas????
y aquí sueltan todos: PORQUE LE QUIERO....y se quedan tan contentos.
aquí es donde debe empezar el proceso para comprender, que lo que llaman AMOR, es DEPENDENCIA.
Esta es la tercera parte de la dependencia EMOCIONAL.
Otro síntoma suele ser "LAS RUPTURAS".
cuando estás en una relación de pareja sana y equilibrada, no hay rupturas repetidas como en los casos de Dependencia. En estas relaciones dejan la relación varias veces, pero a los pocos días de hacerlo, no lo pueden resistir y se reconcilian. Les gusta fantasear con la idea de que su amor es TAN fuerte que puede con todo, y que por ese motivo van a superar cualquier huracán.
Vuelven, intentan implicarse en que van a cambiar, pero se vuelve a repetir la misma historia otra vez.
la persona dependiente siempre tiene una baja auto estima y auto concepto de si misma. Por esto, cuando al principio de la relación el otro se mostraba interesado, se entregó por completo y a ciegas. Con eso tenía suficiente,lo más preciado era que le hiciera sentir importante y valiosa para él.
Y ya por fin. Inés os cuenta todo lo que hizo con mi ayuda para superar esta dependencia emocional que sentía por José.
Tomé conciencia de la situación, sabía que tendría ansiedad porque el hecho de alejarme de él me producía pánico desmesurado, una ansiedad aplastante. pero acepté, que aquella relación no funcionaba. pensé en todo lo que había sufrido, hice una lista. me dí cuenta de todo lo que había sufrido, de todo lo que había llegado a hacer, cuanto me arrastré, degradé, cuanto había cambiado mi forma de ser, por la necesidad de no perder a José.
Incluso una vez, llegué a seguirlo con el coche, y en otra ocasión, contraté a un detective, incluso para retenerlo, intenté quitarme la vida. porque creía que no podía vivir sin él.
Después de hacer esta lista de todo lo negativo. la leí, la releí. y pensé....si no tuviera todas esas cosas negativas..seguiría siendo él?...y él. ¿querria ser así?
- AUMENTAR LA AUTOESTIMA, de esta manera comprenderemos lo que ha pasado y evitaremos que nos vuelva a pasar en el futuro.
- ACCIÓN. pasar a la acción, soltar. dejar la relación. cuando demos este paso, que de entrada nos parece totalmente imposible, tendremos que atravesar otro camino tortuoso y duro: EL
- SÍNDROME DE ABSTINENCIA:ansiedad, desgarro en el corazón, pensamientos obsesivos de él, nos odiaremos por haberle dejado, no comprenderemos por qué lo hemos hecho, nos arrepentiremos, empezaremos a ver lo bueno que tenía y olvidaremos el resto, ganas de llorar desconsoladamente, insomnio, y una necesidad CASI incontrolable de contactar con él.
Cuando tengas el síndrome, y lo superas, éste cada vez empezará a ser menos frecuente hasta que desaparezca.
borra su número, su correo, sus fotos, todo lo que haga que te acuerdes de él.
Y cada vez que sientas que flaqueas y lo necesitas localizar, ver, oír... Distráete con cosas que te impidan durante un día. di para ti misma. hoy no. mañana. y hasta que lo superes.
las recaídas son normales, si bien es mejor esforzarnos por evitarlas. pero lo importante es que volvamos a nuestro eje, que volvamos a salir de allí con más fuerza y ésta vez con más determinación.
Y llama a alguien que te escuche cuando en ese momento tan crítico, te aborda la ansiedad. Hasta que esta vaya desvaneciéndose.
Y así tuvo que entender Inés, que lo de "ahora somos amigos" "quiero ir un día a cenar con él". y en la relación había dependencia, os aseguro que nos estamos engañando. Es como si una persona que el alcohólica te dice: "solo me tomo un whisky los viernes por la noche. No es posible. si hay una adicción, hay que hacer desaparecer la persona de nuestra vida, vencer la necesidad de volver a tenerlo con nosotros y romper así la dependencia.
Y aprender a estar SOLOS. hasta que se haga el proceso de recuperación, de romper con la adicción. si empezamos una relación sin dejar de ser dependientes puede ocurrir:
- Que empecemos a verle defectos y disgustarnos con esta nueva persona que está a nuestro lado, debido a que aun pensamos en nuestra anterior pareja.
- Que aparentemente la nueva relación vaya muy bien hasta que "ahoguemos" al otro al empezar a mostrar nuestros síntomas de dependencia hacia él. O sea, generamos también y sin darnos cuenta, una dependencia con esa persona. Repetimos el proceso debido a que no lo habíamos resuelto satisfactoriamente.
TENEMOS QUE APRENDER A ESTAR SOLOS Y ESTAR BIEN SIN PAREJA. Sin miedo sin ansiedad, en calma y sintiendo bienestar con nosotros mismos.
Ya se que es muy extenso, pero, no se explicarlo de otro modo. espero ayudaros. a que seáis mucho más felices.
